Una vez más nos enfrentamos ayer a la constitución de la Comisión Ambiental de un centro de nueva incorporación al programa, en este caso el colegio San Agustín. Aunque más abajo veáis una mesa con solo cinco personas, no sabéis la cantidad de cosas interesantes que dijeron acerca de su patio. Las dos niñas, Sofía y María, representaban a los últimos cursos de Primaria (4º, 5º y 6º) y Marta, la profesora, nos contó el trabajo de los más pequeños (de 1º a 3º). Hicieron un buen repaso a la situación actual de su patio gracias al profundo diagnóstico que han hecho este invierno: tienen dos patios grandes, uno delantero -el que más usan- y otro trasero, más unos patios interiores. Mucho espacio para el recreo aunque cojea un poquitín según la mirada que nos trasladaron ayer: es un tanto gris -excepto la zona en la que juegan los más pequeños-, faltan plantas, hay algo de suciedad en el suelo, el lugar en el que juegan al fútbol no es el más adecuado ni para Cristiano Ronaldo puesto que tiene dos alturas, hay bancos rotos, los peques no tienen arenero...
Surgieron interesantes propuestas para mejorarlo: hacer una campaña por el pueblo para recaudar un poquito de dinero y de recursos humanos que ayuden en el embellecimiento, pintar las vallas de colores, hacer murales, crear brigada verde... Y como nos parecieron muchos problemas y muchas buenas ideas para resolverlos pero quizá aún no muy definidas, acordamos priorizar los problemas y dar más vueltas a las soluciones. Una cosa quedó clara, hay que movilizar los recursos propios: las buenas ideas de niños y niñas, la colaboración municipal, las madres y padres que viven en el pueblo y las que viven en otros pueblos. Todas estaban dispuestas. Mª Angeles, la concejala que estuvo presente, no daba crédito al gran trabajo que habían realizado las niñas y niños de este cole y se llevó las conclusiones presentadas, aunque también agradeció si se hacía una priorización porque esta información al ayuntamiento le viene como anillo al dedo para cuando presenta proyectos de mejora del centro a Diputación y para las labores más pequeñas que acometen ellos directamente. De hecho, la mejora de los bancos ya está en manos del ayuntamiento. Y qué decir de Celia, la representación del Ampa, ya ha colaborado más veces con el centro decorándolo y no ve el momento de comenzar a hacer cosas para embellecer el cole. Incluso se habló de que Semana Santa sería buen momento para dar algún primer paso.
Surgieron interesantes propuestas para mejorarlo: hacer una campaña por el pueblo para recaudar un poquito de dinero y de recursos humanos que ayuden en el embellecimiento, pintar las vallas de colores, hacer murales, crear brigada verde... Y como nos parecieron muchos problemas y muchas buenas ideas para resolverlos pero quizá aún no muy definidas, acordamos priorizar los problemas y dar más vueltas a las soluciones. Una cosa quedó clara, hay que movilizar los recursos propios: las buenas ideas de niños y niñas, la colaboración municipal, las madres y padres que viven en el pueblo y las que viven en otros pueblos. Todas estaban dispuestas. Mª Angeles, la concejala que estuvo presente, no daba crédito al gran trabajo que habían realizado las niñas y niños de este cole y se llevó las conclusiones presentadas, aunque también agradeció si se hacía una priorización porque esta información al ayuntamiento le viene como anillo al dedo para cuando presenta proyectos de mejora del centro a Diputación y para las labores más pequeñas que acometen ellos directamente. De hecho, la mejora de los bancos ya está en manos del ayuntamiento. Y qué decir de Celia, la representación del Ampa, ya ha colaborado más veces con el centro decorándolo y no ve el momento de comenzar a hacer cosas para embellecer el cole. Incluso se habló de que Semana Santa sería buen momento para dar algún primer paso.
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