En esta ocasión se trataba de poner en común los resultados de la investigación que habían realizado todos los niños y niñas del centro sobre su patio y, además, comparar esos resultados con el diagnóstico realizado en 2012, año de la incorporación del centro a Escuelas para la Sostenibilidad. Desde ese año hasta la actualidad ha habido cambios en el patio: se ha arreglado la fuente, se ha decorado el antiguo depósito de gasoil a modo de barco pirata, se ha creado un huerto, se han pintado juegos en el suelo, etc. Y estos cambios han sido valorados, mayoritariamente, como positivos, destacando el huerto y la fuente como 'ingredientes estrella'. Qué alegría que el trabajo continuado dé buenos frutos.
Eso sí, en la investigación que han realizado este invierno también han detectado que hay muchos elementos mejorables en el patio como que en el campo de fútbol hay piedras y gravilla, que junto al huerto hay bastante suciedad, que la mesa de ping pong no está en el lugar más adecuado, etc.
Todos los presentes (alumnado, profesorado, madres, representación municipal) tomamos buena nota de las conclusiones de este nuevo diagnóstico. Y claro, ya se han esbozado algunas de las propuestas para abordar las deficiencias detectadas, algunas dependen directamente de los niños y niñas como la patrulla verde, y otras de terceras personas. El ayuntamiento tomó buena nota de las necesidades apuntadas por los escolares y comunicó que este verano se van a reparar unas goteras de la cubierta con la subvención recibida de Diputación y, si hubiera algún dinero sobrante, se invertiría en ese listado de necesidades que tan acertadamente habían comentado los alumnos. Y por su parte, los niños y niñas tienen tarea por delante para ver cómo mejorar la limpieza del patio, especialmente de la zona próxima al huerto.
Para finalizar las madres presentes, del Ampa, nos comentaron una gran noticia: se están planteando instalar una compostera junto al huerto. Las lombrices de este patio estarán tan contentas ;-)