
Este año se han convertido en Comunidad de Aprendizaje, lo
que ha supuesto un reto más a los que ya se han embarcado en este centro: paseando
por sus pasillos lo mismo te encuentras con un alumno que busca dónde es la
reunión de la comisión ambiental, que una madre que sale de un aula donde acaba
de estar en un grupo interactivo...
Escuelas para la Sostenibilidad se enmarca, claro, en el
proyecto de la Comunidad de Aprendizaje, y han empezado este curso en dos
líneas. Por un lado, relanzar la Comisión Ambiental que ya están dando sus
primeros pasos analizando el estado del Centro para decidir el tema de trabajo
de este curso. Por otro, formando en la metodología de Ecoauditorías Escolares
a las docentes, porque su equipo educativo se ha renovado casi en un 60% y no
están familiarizadas con las claves de este proyecto. Por eso, el miércoles
pasado tuvimos una sesión de formación en la que mostramos los principios
básicos y la temporalización de nuestra propuesta, y debatimos sobre las
aportaciones que esta forma de trabajar puede tener para la formación de los alumnos. Una interesante
jornada que nos sirvió para repensar Escuelas para la Sostenibilidad ¡y
esperamos que también para acompañar a los alumnos en su co-responsabilización
ambiental!